Jonathan Menéndez volvió a hacer un gol en la “T” tras casi dos años. Tuvo una semana dura por la muerte de su abuela y lloró al final. Triunfal debut albiazul.

El 10 de noviembre de 2017, Jonathan Menéndez jugó su último partido de su primera etapa en Talleres. Fue en el triunfo contra Colón 2 a 0, en Santa Fe, por la Superliga de esa temporada.

Y antes, el 26 de agosto de ese año, en el Kempes, en la goleada 5-2 frente a Lanús, “Jony” marcó su último gol en la “T”, el cuarto del equipo en ese partido y el 10° suyo en el Albiazul, porque después se fue a jugar a Independiente.

Pasaron casi dos años desde entonces. Después de jugar una temporada en el Rojo, recaló a préstamo en el All Rayyan Sports Club de Qatar, donde no tuvo mucha continuidad y convirtió sólo un gol. Luego regresó a Independiente, para también jugar pocos partidos y volver a señalar un único tanto.

Las vueltas del destino futbolístico lo hicieron regresar a Talleres hace sólo nueve días, junto a Nahuel Bustos. Llegó como parte de la operación por la que Sebastián Palacios fue vendido al Rojo y a modo de resarcimiento por los meses que, por contrato, al “Tucu” (que ayer debutó con gol en el Diablo) le quedaban jugar en el club que preside Andrés Fassi.

Y ayer, en su partido número 34 en el club, convirtió, a los 26 minutos del segundo tiempo, el golazo con que el equipo conducido por Alexander Medina consiguió vencer a Vélez Sársfield y debutar con un triunfo por 1 a 0 en la Superliga 2019/20.

Se volvió a ver el “bailecito” a la altura del córner con el que siempre festejaba sus goles en el Matador y los hinchas reverdecieron esas imágenes no tan lejanas en el tiempo. Para él fue un momento de gran alegría, pero su felicidad escondía una circunstancia de amargura que le tocó atravesar durante la semana: el fallecimiento de su abuela.

Por ese motivo, no quiso hacer declaraciones tras cumplir con el control antidoping, aunque algo había dicho al finalizar el partido. Apenas concluido el encuentro en el Kempes, para la transmisión televisiva, Menéndez se refirió a las sensaciones encontradas que experimentó ayer. Por el gol que le dio la victoria a Talleres, pero también por esa circunstancia personal. Y sobre el final de la nota , se quebró.

“Estoy muy emocionado y feliz por el gol que hice y porque nos dio el triunfo, pero también porque para mí fue una semana dura”, comentó, pero sin referirse al motivo de esa tristeza.

Luego siguió hablando con los ojos enrojecidos y relató el desarrollo del gol. “Lo fijé y lo fijé. Ví que me estaban tapando la línea, enganché al medio y le pegué a lo que salga. Y por suerte entró”, comentó, para luego referirse al valor del triunfo.

“Vélez es un equipo que juega muy lindo al fútbol. Enfrentar a un rival así en el debut del torneo y que le ganemos, es un mérito muy grande para nosotros”, señaló.

Y con las pulsaciones a mil, el cronista le preguntó a quien le dedicaba su anotación. “Para mi familia, para mi novia y para mi abuela, que está en el cielo”. No pudo evitar que la cámara captara sus lágrimas y se fue apurado.

La previa había sido dura, pero los hinchas intentaron levantarle el ánimo, tal el caso de Mariano Gasseuy quien se fue al hotel de la concentración y al encontrarlo, le dijo: “La vas a romper”. Y así fue.

Son las historias detrás de otras historias que siempre esconde el fútbol. La suya, lejos estuvo de pasar inadvertida ayer. Máximo porque ese regreso goleador le permitió a la “T” tener un debut triunfal ante un exigente rival.

Los 80 partidos de Komar

Juan Cruz Komar jugó su partido número 80 en Talleres. Lo hizo en un gran nivel y, además, portando la cinta de capitán del equipo. Con sólo 22 años –el mes que viene cumplirá los 23– ratificó que, además de ser un referente del plantel, atraviesa su mejor etapa en el club.

“No sabía que ya llevaba 80 partidos. Me pone muy contento y también que haya vuelto a ser el capitán del equipo. Me genera una gran responsabilidad, pero linda”, señaló el central.

Puesto a evaluar el rendimiento del equipo, Komar señaló: “Es un triunfo muy importante. Le ganamos a un rival bravo, que se conoce de hace tiempo, con movimientos ofensivos interesantes. El equipo estuvo muy bien en lo defensivo y cumplió el objetivo de jugar en los bloques cortos. Veníamos preparados para un partido largo”. El defensor ponderó la jugada del gol: “Vélez siempre tiene intenciones de jugar y lo tomamos abierto”.