Arzubialde rescató el triunfo de Talleres resaltando el convencimiento del equipo. Además, reiteró la moral del grupo y quiso trasmitir seguridad. “El vestuario siempre estuvo unido, puertas afuera, no lo podemos manejar”.

Con el rostro inundado de satisfacción y algo de alivio, el técnico de Talleres, Héctor Arzubialde, realizó el resumen de la primer parte de la temporada que acaba de finalizar. Su discurso no fue diferente: destacó la unidad grupal, minimizó los rumores y la presión y reafirmó la voluntad de cumplir el objetivo de ascender. “Yo siempre estuve tranquilo. Las dos derrotas dolieron y eso en Talleres siempre toma mayor dimensión. Cumplimos la primera meta que nos planteamos que era terminar primeros en la tabla, con una ventaja importante. Les agradezco a los que siempre confiaron en nosotros”, se explayó Arzubialde.

-Un triunfo que reconforta, tras una semana difícil...
-El balance es positivo. Talleres está puntero, y tenemos las convicciones muy firmes. Hay que seguir manteniendo la calma. Puertas adentro, yo sabía que íbamos a recuperarnos porque está unido el grupo. Y lo que sucede puertas afuera no lo podemos controlar. Acá ganamos 10 partidos de 17 jugados y no salimos a hablar huevadas.

-Se reencontraron con la contundencia...
-Sí, por suerte, eso nos llevó a ganar holgadamente, ante un rival que nos jugó con inteligencia, porque plantó tres puntas y por eso, tuve que colocar un volante más en nuestra defensa. El primer tiempo fue difícil, pero cuando tuvimos la decisión de buscarlo, la historia fue otra.

-¿Qué cambió de un tiempo a otro?
-Logramos el convencimiento necesario y golpeamos. Hablamos de presionar más al rival, porque venían imponiendo el ritmo que más les convenía. Por eso, marcamos la diferencia, en un partido que era chato y no podíamos lastimar.

-¿Le sorprende la presión que tiene Talleres?
-Hay cuestiones que quedan implícitas, por eso no me parece bien que se recargue de presión a algo que ya se sabe. Igual, sabemos lo que significa Talleres, y el que no esté dispuesto a soportar la presión y el termómetro del hincha, que de un paso al costado.

“Sabíamos que Juventud Unida venía a jugar con tres delanteros, y por eso, estuve que pararme casi de zaguero central, tomando al jugador libre de ellos. Por suerte, las cosas salieron como planeamos”. Emiliano Gianunzio

“Estoy contento con mi gol pero sobre todo con la actitud del equipo. Nunca perdimos la paciencia y eso fue fundamental, porque el trámite estaba muy cerrado. Despedimos el año de la mejor manera”. Martín Seri