El encargado de seguridad de Juventud Unida, Carlos Góngora, quien también forma parte de Ateliers, empresa que comanda Carlos Ahumada, dio su versión de los incidentes y manifestó que harán una denuncia correspondiente en la policía local. “De a cuerdo a la información que recogimos en los palcos contiguos al de la gente de Talleres, la rotura del vidrio fue porque se agolparon al vidrio para festejar el gol. Nada más”, manifestó a LA MAÑANA. “En el pasillo que conduce a los vestuarios, el jugador Gabriel Ruiz, le pega un puñetazo a un vidrio y se cortó solo, de manera involuntaria”, añadió.

Además, destacó que hubo tres futbolistas albiazules que serán notificados por incitación a la violencia. “Se trata de tres jugadores (uno sería el arquero Federico Crivelli) que le hicieron señas obscenas al público local cuando se retiraban de la cancha, provocando a todos”, dijo Góngora. “Tenía razón la Policía de San Luis al prohibir que venga gente de Talleres, porque si sus directivos y sus jugadores tienen ese comportamiento, uno no imagina lo que podría haber pasado con tres mil hinchas más en el estadio”, cerró. Entre las pruebas que tiene para presentar la denuncia, la gente de Juventud Unida aseguran tener fotografías e imágenes de los implicados, en plena acción.