En la vuelta a los entrenamientos, los jugadores no dejaron presenciar la práctica. Lussenhoff regaló 29 casilleros para el vestuario. El plantel viaja a Tres Arroyos.

Talleres retomó las prácticas en la tarde del lunes, pero no hubo chances de saber qué trabajo ordenó "Tito" Rebottaro porque el DT y los jugadores decidieron que fuera a puertas cerradas.

El ánimo del plantel, después del empate con Santamarina de Tandil, el domingo en el Chateau Carreras, no es el mejor. De todas maneras, las chances de la "T" se mantienen intactas aunque ya no dependa de sus propios resultados.

Talleres enfrentará a Huracán de Tres Arroyos el miércoles a las 21.30, como visitante, por la tercera fecha del pentagonal final del Torneo Argentino A.

Para el trascendental partido, la "T" deberá realizar un viaje especial. Partirá el martes a las 6 de la mañana, desde el aeropuerto Córdoba y volará hacia Buenos Aires. Desde allí, también en avión, viajará hasta Bahía Blanca para luego dirigirse, en colectivo, a Tres Arroyos.

La buena fue que Federico Lussenhoff (quien había tomado la decisión, junto al arquero Matías Giordano, de que la prensa no entrara a ver el entrenamiento) le regaló a Talleres 29 casilleros (lockers) para que los futbolistas guarden sus pertenencias.