Comizzo asumió y dijo que los jugadores deben entender qué camiseta defienden. Se mostró convencido de la recuperación.

El legado histórico del Talleres de los ‘70 y los ‘80 suele ser un buen recurso para un DT que llega al club. Sobre todo si es novato y la data indica que se vive uno de los peores momentos de la participación albiazul en torneos de AFA.

Esa cuestión sentimental en boca de cualquiera remite a verso. En palabras de alguien como Ángel Comizzo, puede sonar distinto, casi una esperanza para tanta malaria. Y en su primer día como entrenador, el ex arquero albiazul bajó una línea clara.

“Con el simple hecho de ponerse esta camiseta, el jugador tiene que entender los colores que defiende y qué camiseta representa en la cancha. Hay que trabajar en todo. Estoy convencido de que vamos a salir adelante. Primero el orden, luego el fútbol. Pero uno que conmueva. ¿Ir al frente a cualquier precio? No, eso sería suicidio”, fue el primer argumentos del “Flaco”.

“Quiero jugar en la Boutique por la historia que nos rodea”, agregó Comizzo.

Se trató de un mensaje que está en sintonía con el objetivo de las nuevas autoridades de la gerenciadora, que quieren jugar en barrio Jardín a cualquier precio. ¿Una paradoja? Fue dicho por alguien que desarrolló la mayor parte de su carrera albiazul, jugando en el Chateau. “Mis expectativas son las mejores. Aquí pasé seis años. Inicio mi carrera como entrenador en el club que me vio nacer futbolísticamente. Tendré la gran posibilidad de estar en el banco el día que se reabra esta casa, donde mucha gente va a sentir algo especial por la historia que rodea al club. Por acá pasaron los mejores jugadores”, insistió el DT.

De buen ánimo y sonriente, Comizzo habló al final de la práctica, la que fue presenciada por dos ex compañeros como José Daniel Valencia y José Luis Pocchettino. “Me vinieron a acompañar en este día tan especial”, reconoció el ex arquero.

Orden y recuperación. Después de las cuestiones generales y sentimentales, Comizzo dejó ver algunos temas específicos de su trabajo. Los entrenamientos simples serán a la mañana (con Rubén Insua se entrenaba por la tarde) y habrá más doble turno, el cambio de localía y la evaluación de los partidos.

“La derrota ante Independiente ya pasó. El viernes jugaremos una final ante Ben Hur. Intentaremos plantear el mejor equipo posible”, sostuvo Comizzo.

El ex arquero, que asumió con la expectativa que en sus respectivos ciclos no pudieron satisfacer Salvador Capitano y Rubén Insua, dialogó durante 20 minutos con los jugadores y luego dividió al plantel en dos partes. Los titulares hicieron ejercicios físicos y los suplentes realizaron una práctica de fútbol.

–¿Logrará un equipo que esté atento 90 minutos?
–Es uno de los puntos a tocar. Los jugadores lo saben.

–¿Siente que los tiempos son cortos?
–Hay 42 puntos en juego. Tenemos tiempo. Vamos a salir.

–Hay DT que pierden tres partidos y se tienen que ir…..
–Esperemos que no pase.

–¿A qué jugará Talleres?
–Intentaremos ser un equipo ordenado. A partir de ahí, que juegue. Pero que con un fútbol que conmueva, si se puede. Hay que ser agresivos para recuperar la pelota. Y que, cuando juguemos, lo hagamos con una responsabilidad tal que el que pierde la pelota sea el primero que la vuelva a recuperar.

Las consignas de Comizzo están. ¿Serán suficientes?