En los últimos días, se aceleraron los trabajos en la Boutique de barrio Jardín porque según versiones surgidas del entorno de Carlos Ahumada, el nuevo hombre fuerte de Talleres quiere que el equipo sea local en su cancha. Es más, se rumorea que planea el regreso para el choque con Independiente de Mendoza, es decir la fecha siguiente al clásico con Instituto.

La noticia llama la atención, porque la Boutique, aún refaccionada, no tendría capacidad para más de 14 mil espectadores y Talleres, cuando recibió a Almagro en la segunda fecha, puso 30 mil personas en el Estadio Córdoba.

Pero la idea de Ahumada es que sólo ingresen socios y hoy por hoy el padrón albiazul es de cerca de 8.000. El nuevo gerenciador parece estar dispuesto a pagar el costo político de dejar gente afuera. Sobre todo si Talleres gana el clásico.

Los trabajos incluyen obras en los vestuarios, en los baños y en la fachada, con instalación de baños químicos y parquisación del frente del estadio. También sacaron las viejas butacas de metal en la platea, para comenzar a reemplazarlas en los próximos días por otras de plástico.

La remodelación vendría tan en serio que Ahumada maneja un proyecto para construir tribunas a partir de mitad de año, y ampliar la capacidad de la Boutique.