La lluvia que se abatió sobre Córdoba todo el día no impidió que el plantel de Talleres visite el Hospital de Niños para entregar los pañales recolectados el sábado, y compartir un grato momento. No estuvo Carlos Ahumada, impulsor de la idea.

«Devolverle a la sociedad el cariño que nos dan», fue una de las consignas más repetidas entre los futbolistas de Talleres, que se dieron cita al Hospital de Niños de la ciudad.

El sábado, con motivo del cotejo Talleres-Almagro en el estadio Córdoba, se recolectaron cerca de cien bolsas de consorcio con pañales descartables y ayer todo el plantel albiazul, junto con el entrenador Rubén Insúa, se dieron cita en el nosocomio para llevar lo recaudado y realizar un recorrido por las instalaciones.

Los jugadores de Talleres, encabezados por el capitán Julián Maidana, el técnico Rubén Insúa y los goleadores Iván Borghello y Héctor Cuevas, visitaron a los niños que estaban internados, por momentos, con alegría por el efecto que causaron. Firmaron autógrafos, se sacaron fotos con los pacientes, padres y enfermeros, y las caras se transformaron por las huellas de la pena cuando les tocó pasar por el sector de oncología.

El director del hospital, Héctor Francisco de Uriarte, les entregó un reconocimiento y quedaron en reunirse, nuevamente, con gente de Ateliers, ya que la idea de la gerenciadora «es continuar trabajando juntos». Hay varios proyectos y se analiza el modo de llevarlos adelante. Uno de ellos es ayudar en una sala que se está reacondicionando.

La iniciativa de colaborar con el hospital partió del nuevo hombre fuerte de la «T», Carlos Ahumada, que el sábado donó un cheque de diez mil pesos, y tuvo rápido eco entre los demás integrantes de la gerenciadora y del plantel.

«Fue muy positivo. Es un lugar donde hay necesidades todos los días y queremos ayudar», manifestaron desde Ateliers y agregaron: «Queremos llegar a la familia y que la familia vuelva a las canchas y este es un modo de acercarnos».