Su gol le dio el triunfo a Talleres y le permite ser el artillero albiazul con once tantos. Y pensar que Iván Borghello, de él se trata, pasó la noche previa con 37 grados por un estado gripal.

Talleres sufría demasiado por los errores defensivos e igualaba 3-3 con Almagro, pero a los 43 minutos del segundo tiempo, tras un excelente desborde de Matías Quiroga, el delantero Iván Borghello le dio el triunfo a la «T». En el festejo el «Memo», quien lleva 11 goles en el certamen, se estrechó en un abrazo con Julio Ferreyra, el médico del plantel.

Es que el goleador no pudo dormir debidamente la noche previa al cotejo por un estado febril y el facultativo lo medicó y estuvo atento a su estado durante varias horas. Finalmente, Borghello jugó todo el partido y fue nuevamente héroe.

- Estuviste enfermo, pero pudiste jugar ¿Cómo te sentiste?
- No es el estado adecuado para jugar, pero gracias al doctor Ferreyra, que me estuvo medicando durante toda la noche, jugué. La verdad pasé una noche muy mala, pero por suerte pude estar y aguanté bien.

- Cuando el equipo gana ¿la recuperación es más fácil?
- Seguramente. Cuando perdes volvés a casa con todos los dolores juntos, y cuando ganás te vas tranquilo y contento.

- Sufrieron mucho para ganar...
- Fue un partido con muchas sensaciones, pero la más importante es la que tenemos ahora, de saber que ganamos. Seguramente no era de la forma en que queríamos, pero mientras ganemos todo se puede corregir.

- ¿Por qué se les complicó?
- En el segundo tiempo entramos dormidos. Son errores que podemos corregir y además mostramos un juego que no se veía en el torneo anterior. Nos queda el gustito amargo de que nos hagan tantos goles, pero nos vamos contentos con el triunfo.

Borghello fue el más aplaudido en la previa al cotejo y respondió, a pesar de su estado, con el gol del triunfo. Además, les dejó un mensaje a sus competidores: «Con estos tres puntos, Talleres está en una posición expectante. Antes no estábamos ni en esa condición. No estamos para nada dentro de la pelea, pero ya los equipos saben que cuando tengan que enfrentarnos tendrán que cuidarse.

Pura matemática. «Mientras hagamos un gol más que el rival, estamos bien». Un sonriente Rubén Insúa dio su opinión del esforzado triunfo y añadió: «El resultado es merecido. Talleres debió haber ganado por una mayor diferencia. Lo que pasa es que el rival aprovechó nuestros errores».