Talleres regresará hoy a los entrenamientos sin caras nuevas y con algunas bajas en su plantel, con respecto al que disputó la primera rueda de la Primera B Nacional.

El entrenador albiazul, Rubén Darío Insúa solicitó cuatro refuerzos: dos defensores, un enganche y un jugador a resolver de acuerdo al mercado.

Entre las bajas que tendrá el plantel están el delantero Emanuel Rivas, quien rescindió para jugar en el ascenso italiano, y el mediocampista Franco Dolci, quien entre hoy y mañana se sumará a Chacarita Juniors. Ambos jugadores eran tenidos en cuenta por el entrenador.

Cabe recordar que el arquero Damián Grosso se había desvinculado antes del final de la primera rueda, al igual que el mediocampista Sebastián Brown.

De los jugadores que Insúa había declarado prescindibles, quienes rescindieron sus contratos fueron tres: los defensores Germán Rivera y Dante Pérez y el delantero Ezequiel Miralles.

Los otros de aquella lista que no llegaron a un acuerdo para lograr una salida del club hoy deberán presentarse en barrio Jardín, aunque es probable que no viajarán con la delegación que el próximo lunes trabajará en San Luis.

En materia de contrataciones, no hubo avances. Sigue latente la chance de que se sume el defensor Aldo Paredes, quien es del gusto del director técnico y no habría llegado a un acuerdo con Independiente Rivadavia, otro de los equipos que lo pretende.

La dirigencia debe lidiar con que los jugadores esperan ofertas de Primera División.