El Matador, ante más de 40 mil hinchas, le ganó 1-0 a Estudiantes de San Luis y estiró a 10 puntos la ventaja sobre los escoltas. ¡Punterísimo!

Fue esa noche que no tuvo todas sus luces, pero sí toda la locura imparable e incontenible entre su gente. En las tribunas. Talleres le ganó bien a Estudiantes de San Luis en un Mario Kempes con más de 40 mil fanas presentes de la T. Fue el "Escape Perfecto" y el Matador se llevó una montaña de premios. Porque la ventaja de 10 puntos sobre Chacarita y Gimnasia de Jujuy en la tabla lo pone de cara a una realidad ineludible: el ascenso está más cerca que nunca.

Quedan 18 puntos en juego y todo está a pedir del equipo de Kudelka.

Regulando, tranqui. Talleres no habia sido avasallante en un primer tiempo que regulò sobre un rival, elocuentemente, afectado por sus circunstancias, la deuda institucional y las condiciones precarias en la que lleó a Córdoba. Así lo fue llevando con estocadas de Nazareno Solís o con algunos pelotazos de Barrionuevo hacia Klusener.

Valentín Brasca, aquel arquero que hiciera inferiores en la T, tuvo que esforzarse en un par de atajadas, pero nada más de peligro por parte de un Talleres que lo fue trabajando con lentitud. Hasta que pasados los 40m del PT, una pelota encontró al 9 interminable de Talleres mano a mano, car a cara.

Gonzalo Klusener la picó hacia un ángulo y definió con maestría. Por eso, Talleres le está ganando a los 41m del PT 1-0 a Estudiantes de San Luis.

En línea generales el primer tiempo mostró a un equipo que fue de menor a mayor, arribó al gol regulando y su rival sólo se dedicó a esperar, a pasar una etapa con cierta dignidad. No tuvo picos de un fútbol de ensueño. Al menos sólo se las arregló la T para cumplir con las necesidades primarias de empezar a trabajar los tres puntos.

Final cantado. Talleres sostuvo el patrón de juego de toda la noche: regular. Llevarlo sin mucho esfuerzo ni un desmedido desgaste. Lo podría haber cerrado, pero estaba flotando en el aire esa sensación de que lo ganaría sin sobresaltos. Y así fue. El complemento tuvo la parsimonia de la mismísima primera etapa.

Con la locura y la ilusión de su gente en las tribunas, Talleres tuvo su escape perfecto. Se despegó 10 puntos en la tabla y todos se ilusionan. Está, sí cada vez más cerca del sueño de volver a primera.