Talleres no supo sostener la ventaja dos veces en el tanteador y cayó 3-2 con Independiente Rivadavia y capitaliza su inminente descenso al Argentino A. Debe sumar todo y que pierdan los rivales. Inviable en lo deportivo, con muchos responsables.

Mendoza - Especial.- Una serie de resultados ajenos le deja cierto pulso a Talleres con relación a su permanencia en la categoría, pero su estado vegetativo en lo deportivo, a esta altura es irreversible. Un plantel desolado emocionalmente, con actitud dispar y una marcada y aguda bipolaridad en el juego dan como resultado un rápido retorno al Argentino A. Talleres perdió 3 a 2 ante Independiente Rivadavia en Mendoza, después de estar dos veces por delante en el tanteador. Pero su crisis psicológica pudo más. Por eso, no formalizó su descenso pero es cuestión de que el tiempo decrete lo inminente que no logró conseguir por méritos propios.

Increíble. Quedan tres partidos en juego, nueve puntos por cosechar pero igual la esperanza está cada vez más lejana. Otra vez le empatar apenas se pone en ventaja: el gol de Gonzalo Klusener se celebró solo por tres minutos hasta que Carboni dejó todo como el inicio, y el tanto de Nery Leyes, tan festejado por la propuesta y convicción, casi no se disfrutó porque poco más de 10 minutos las cosas volvieron a equipararse, por acción y obra de Diego González Vega. Jugado por jugado, Lucas Gamba sentenció la suerte del partido y de yapa, sacó el decreto que condena de muerte al albiazul. Muchas aristas pueden tomarse desde lo táctico, del riesgo que tomó Jorge Ghiso, con defender con tres hombres para lograr la diferencia y el rearme con cuatro de fondo, sin embargo, los fríos resultados indican que se vuelve a Córdoba sin nada en los bolsillos. Y otra vez contra un rival directo, “campeonato” del cuál los de barrio Jardín también perdieron por goleada.

La tabla no miente, Talleres es el antepenúltimo de la tabla de la B Nacional. Y tuvo un 2014 horroroso, con solo tres victorias. No pudo conducir al equipo ni Arnaldo Sialle, ni Rubén Forestello, ni la dupla interina Sergio Coleoni-Mario Obulgen ni ahora Ghiso. Un plantel sin jerarquía, decisiones equivocadas desde la dirigencia, imposibilitaron el cambio de timón.

El respirador automático se desenchufa de a poco. Nunca había descendido con tantas fechas de anticipo en la B Nacional. Desde diciembre se conoció el pronóstico sin embargo, las determinaciones asumidas parecieron orientadas en contrapartida del objetivo. Dentro de la cancha, los verdaderos responsables quedaron en deuda casi en default. Fuera de la misma, hay responsables de saco y corbata que no quedan exentos de este fracaso. Cuatro años en el Argentino A y seis meses bastaron para conocer de antemano que la permanencia no estaba sustentada del todo. Tan endeble que al final, a nadie sorprendió este magro presente ni el descenso inevitable a esta altura.


Síntesis

Independiente Rivadavia 3. 1- Josué Ayala; 2- Martín Pucheta, 4- Walter García y 3- Lucas Parisi; 6- Matías Villarreal; 8- Abel Peralta, 5- Emiliano Fernández, 10- Ezequiel Pérez y 11- Diego Cardozo; 7- Lucas Gamba y 9-Leonardo Carboni. DT: Roberto Trotta.

Talleres 2. 1-Federico Costa; 4-Gastón Bottino, 2-Esteban Burgos, 6-Renzo Vera y 3- José Schaffer; 5- Nery Leyes y 7- Agustín Díaz; 8- Ezequiel Barrionuevo, 10- Favio Álvarez y 11- Cristian Pavón; 9- Gonzalo Klusener. DT: Jorge Ghiso.

Gol: PT: 6m. Klusener (T); 9m. Carboni (IR). ST: 25m. Leyes (T) y 37m. González Vega (IR) y 40m. Gamba (IR).
Cambios: ST: Al inicio 15- Diego Tonetto por 11- Cardozo (IR); 16m. 16- Gabriel Carabajal por 10-Alvarez (T); 22m. 18- Juan Sánchez Sotelo por 3- Schaffer (T); 29m. 18- González Vega por Villarreal (IR); 30m. 17- Elvio Fredich por 11- Pavón (T); 46m. 13- Julián Moyano por 7- Gamba (IR)
Amonestados: En Indep. Rivadavia: González Vera. En Talleres: Leyes, Vera.
Expulsado: ST: 49m. Leyes (T).
Árbitro: Mauro Gianini.
Cancha: Independiente Rivadavia

LA FIGURA
Lucas Gamba. El delantero de Independiente Rivadavia fue peligro permanente ante una defensa que dio todas las garantías. Falló una y se redimió en el final para que ganara el local. El mejor de Talleres fue su arquero debutante, Federico Costa.

EL ÁRBITRO
Mauro Gianini (Flojo) Regular para abajo, no incidió en los fallos, expulsó bien a Leyes y hasta pudo cobrar un penal a favor del local, que ignoró.

LA CLAVE
La desidia anímica de Talleres y su poco aplomo para liquidar los partidos, cuando tuvo dos veces superioridad en el marcador. Sin carácter. Sin reacción.

"Hay una gestión deportiva muy mala en cuanto a la selección de refuerzos, que no han rendido en lo más mínimo. Nosotros hoy tenemos un contrato con el fideicomiso que está vigente. Y lo que no vamos a hacer es abandonar el club". Rodrigo Escribano, titular del Fondo de Inversión