Jorge Ghiso. Llegó anoche a Córdoba y hoy a primera hora asume como DT albiazul. El sábado dirigirá ante Defensa la primera de 11 finales para lograr la permanencia. Le ganó la pulseada a Mario Gómez.

“Siempre los desafíos son buenos. Cuando te vienen a buscar, muy pocas veces es porque las cosas van bien. Hay que estar preparado. Uno no tiene que caerse nunca. Hay que tener fe y trabajar con seriedad. Si no pensaría en salvarlo, no vengo”. Jorge “Vitrola” Ghiso denotaba una gran expectativa anoche al llegar a Córdoba. Ya estaba dispuesto a vivir el minuto a minuto del Mundo Talleres, que pendula entre el pesimismo de los que sostienen que será difícil conservar la categoría para el primer equipo y el optimismo de los que se esperanzan con una levantada en los 11 partidos que quedan. Justamente, el grupo en el que el pretende incluirse. “Hay que jugar al fútbol contento. Creo que los resultados vienen solos si hacés las cosas bien”, dijo anoche apenas arribado.

El nuevo entrenador albiazul asume hoy a primera hora la conducción del plantel profesional de Talleres, en la Boutique de barrio Jardín, y relevará a Sergio Coleoni, quien se hizo cargo en forma interina tras la partida de Rubén Forestello y logró el 3-1 a Ferro y cayó ante Independiente por 3-0. Una vez terminada la práctica, a las 11.30 se hará la conferencia de prensa que servirá como presentación oficial.

La definición. La definición llegó ayer a la tarde. Pero hasta ese momento Ghiso competía con Roberto Mario Carlos Gómez. “Estoy esperando que me llamen los dirigentes. Estuve con ellos el fin de semana. Avanzamos bastante. Es complicado, pero veo que se puede. Sé que no soy el único candidato”, comentó Ghiso, temprano a Mundo D.

“Vitrola” se consideraba capaz para el reto de dejar a Talleres en la B Nacional, pero también fue realista. El ex DT de Instituto (en 1996 perdió la final con Unión y en 2008 salvó la categoría), Atlanta (lo último), Independiente Rivadavia, Quilmes (ascendió a Primera) y Ferro sabía que, a esa hora, se sostenía una reunión con Gómez. El sábado pasado, antes del juego con Independiente de Avellaneda, en Buenos Aires, y el domingo, ya en Córdoba, había sido su turno. En sendas cumbres con el Fondo de Inversión había convencido a varios de sus miembros.

Pero en ese momento, el del primer contacto de Ghiso con este diario, Gómez se entrevistaba con los integrantes del Fondo de Inversión. El exentrenador de Belgrano, Gimnasia y Esgrima de Jujuy (dirigió al hoy gerente deportivo albiazul Maximiliano Salas), Ferro y de último paso en Deportivo Cuenca de Ecuador había llegado con uno de sus colaboradores para charlar con los inversionistas de Talleres. “Es complicado. Escuchamos, pero aún no llegamos a ningún acuerdo”, comentó “el Curita”.

Luego de evaluar ambas propuestas, los inversionistas Rodrigo Escribano, Alberto Escalante, Ernesto Salum y Hugo Bertinetti, más Aldo Roggio (el accionista más importante del grupo, quien estuvo en permanente contacto), llegó la hora de la elección. Los estilos eran bien diferenciados. El de “Vitrola” con la creencia de que puede lograr resultados a partir del juego y el de Gómez, pensando más es un equipo “sacapuntos” que otra cosa.

En el siguiente contacto, Ghiso confirmó todo. “Sí. Ya me llamaron. Faltan algunos detalles que estamos tratando de cerrar. Pero todo está bien”, señaló “Vitrola”, cuyo tono de voz fue el mismo de siempre. Amable, optimista y claro. Como se espera que lo sea para poder llegarles a los jugadores de un plantel que ya pasó por Arnaldo Sialle y los mencionados Forestello (en ocho partidos empató cuatro y perdió el resto) y Coleoni.

–¿Cómo ves la situación?
–Es complicada pero hay esperanzas. Vi al equipo frente a Independiente. No es bueno hablar de lo que uno ve. Se lo diré a los futbolistas. Creo que se hicieron muchas cosas bien, después hay que corregir errores, porque si no existieran, no habría derrotas. Cuando uno va mejorando, sin lugar a dudas, va a sacar mejores resultados.

–¿Algún plan ya definido?
–Hay formas y formas. Creo que de un día para el otro no se puede cambiar todo. Hay que ir despacio y hay que sacar resultados ya. Por lo menos hay que ganar siete partidos. Con eso puede estar tranquilo. No es nada fácil lograrlo en un campeonato tan competitivo.

Ghiso se vino a Córdoba, pero el entrenador alterno, el inseparable Luis Núñez, se fue a Florencio Varela para ver la presentación del líder Defensa y Justicia, –rival de Talleres el próximo sábado a las 17 en el estadio Mario Kempes– contra Sarmiento de Junín. Finalmente, Ghiso arregló con Talleres con la posibilidad de continuar si logra la permanencia y rescindir si el equipo se va al descenso. Además de Núñez, “Vitrola” será acompañado por su hijo Ignacio Ghiso, quien también supo estar junto a él en su segunda gestión en la Gloria.

Arranca. El plantel albiazul inició ayer los preparativos para recibir al líder. La práctica fue conducida por Sergio Coleoni, junto con su ayudante Juan Mario Obulgen y el PF Eduardo Larghi. El cuerpo técnico interino estará en la asunción de Ghiso. Para este partido, el flamante entrenador dispondría de Pablo Santillo, ya recuperado de un golpe en una mano, mientras que recién ante Instituto tendría chances de contar con Gabriel Carabajal, que se recupera de un desgarro. ¿Y Juan Pablo Avendaño? Persisten las molestias en los gemelos de una pierna, una lesión que ya lo dejó fuera del encuentro ante Independiente, el sábado pasado. Ghiso anticipó que entrenará en doble turno toda la semana.

La ficha


Jorge Luis Ghiso. Nació en Capital Federal el 21 de junio de 1951 (62 años). Como futbolista fue puntero izquierdo de River (1970-75, 88 partidos, 11 goles), Atlético Tucumán (1975 y 1980, 26 partidos, 5 goles) y Estudiantes de La Plata (1979, 22 partidos, 1 gol).

Jugó en la selección argentina en la gira por Europa en la previa al Mundial ’74. Hizo un gol contra Alemania (victoria argentina 3-2). También jugó en la “U” de Chile, Universidad Autónoma de Guadalajara, Rayo Vallecano, Armenio y Everton de Chile.

Como DT dirigió a Laferrere, Atlanta, Instituto (1995-96 y 2007-08), Atlético Tucumán, Rafaela, Español, Cipolletti, Reserva de River, Quilmes (lo ascendió a Primera), Ferro e Independiente (Mza.). Su último club fue Audax Italiano (2013).

El undecagonal de “Vitrola”


Por Guillermo Puente | [email protected]

“Es mejor debutar con el primero porque los jugadores van a querer demostrarme para qué están. Mirá si empezás con el último y perdés”. Con esas palabras, Jorge Ghiso asumía en octubre de 2007 en un Instituto que estaba muy complicado con el descenso y tenía que debutar días después con el líder de la B Nacional. “Vitrola”, en esa temporada, logró el objetivo albirrojo de mantener la categoría. El destino quiso que Ghiso debute en la “T” contra el puntero, Defensa y Justicia. El desafío es mayor porque Talleres está más comprometido con el promedio y los partidos son menos. El DT tendrá 11 encuentros para intentar el milagro de la salvación. No tiene nada que perder (heredó este difícil presente albiazul) y todo por ganar. No viene con fórmulas mágicas. Sólo con su experiencia y una forma muy particular para motivar a los futbolistas. Esta es la última carta del club de barrio Jardín para intentar zafar del infierno tan temido.