El defensor, flamante refuerzo de la T, destacó llegar a " un club grande donde no te hacen faltar nada, solo hay que pensar en jugar".

Nicolás Ballestero lleva dos prácticas como refuerzo de Talleres y no ocultó su satisfacción por su llegada a barrio Jardín.

"Es increíble. Es lo que yo esperaba de un club grande donde no te hacen faltar nada, solo hay que pensar en jugar", indicó el defensor de 28 años, ex Cipoletti de Río Negro. "Ahora solo hay que trabajar y tengo que conocer a mis compañeros", agregó en radio Suquía.

"Lo tomo como un desafío importante, pero no lo tomo como una presión. Presión es otra cosa, como un problema de salud, nosotros hacemos lo que nos gusta que es jugar al fútbol", reconoció el defensor.

"Hay que tener mucha actitud para jugar este campeonato. Trabajando de a poco vamos a revertir la situación", completó Ballestero.

Junto al defensor, llegó el delantero Alexis Olivera, quien también ya entrena en los albiazules.