El ex delantero de Racing es ahora la opción principal en Talleres. Racing también lo pretende. Ballesteros, a un paso de barrio Jardín.

Tanto Talleres como Racing buscan reforzar el ataque. En este caso, los dos clubes pusieron la mira en el mismo delantero. “La Academia” lo tuvo en dos ciclos (2009 y 2010-11) en tanto que el albiazul lo sufrió dos veces en la misma temporada. En su momento hizo el intento pero quedó solamente en intenciones. Ahora es más formal, porque por más que Racing ya entablara negociación, es Talleres el que ahora podría apostar con todo. “No quiero aventurarme ni apresurarme, pero concreto, no he recibido nada. Yo espero que no debe pasar de esta semana mi incorporación a algún equipo, porque quiero ponerme a tono y realizar la pretemporada. En Córdoba me fue muy bien, ojalá pueda repetir”, cuenta Olivera a PODIO quien acaba de terminar su vínculo con Manta de Ecuador.

- A Talleres le convertiste dos goles...
- Sí, fue con Racing, la temporada pasada. La verdad, los dos clubes me seducen mucho. Talleres porque es un club grande, con mucha historia, y todos sabemos lo que convoca en cada partido. Es tremendo. En Racing tengo el mejor recuerdo, porque me pude destacar cada vez que estuve ahí y eso me permitió un crecimiento en mi carrera.

- ¿Qué sabés de las gestiones?
- Nada. Sé que Racing se comunicó preguntando, y ahora depende de la parte económica. Yo no quiero bajar mucho de lo que percibía en Ecuador. Y de Talleres tengo entendido que se comunicó el gerente deportivo con mi representante, pero nadie de los que conducen la institución. En esta etapa, hay más ruido que otra cosa, pero igual, me gustaría avanzar con algún ofrecimiento. Hubo sondeos de equipos de la B Nacional también, pero concreto, nada.

- ¿Dónde imaginás tu futuro?
- Ojalá en Córdoba, veremos. Ahora todos los clubes especulan con el mercado de pases, entiendo que en estos tiempos, nadie se apresura en contratar. Hay muchas especulaciones. Yo quiero que 2012 sea mi año. Y ojalá sea en Córdoba, en Racing o Talleres, salvo que aparezca una oferta superadora en todo aspecto.