Los goles que no fueron. “En esta instancia no podemos errar lo que erramos”, coincidieron los players de Talleres. Mucho gouuuuuhhhh...

El negro cara de Tucán perdió por lento. “El que llega último a la parrilla va al arco”, tira un gordo que sala una faldita como si acariciara la espalda de una amante. Con clase. Y el negro no llega. Le pesa la siesta. Va al arco. Los otros juegan a ser Riaño y Sacripanti. ¿La pelota? Una bolsa de carbón con papelitos de diario adentro. Y ahí definen con derecha y zurda, inventan goles mientras se llenan de humo.

Sí, los parciales de Talleres tuvieron que conformarse con goles de fantasía que quedan en la memoria etílica de los que viajaron a Sunchales. Es que después, el 0-0 los dejó con las ganas, atragantados.

Y el sentimiento de los simpatizantes tuvo relación con los protagonistas dentro del campo. La sensación que dominó los discursos de los jugadores Matadores fue la misma. La falta de definición es la mayor preocupación que llenó los bolsos de la utilería.

Ingacio González Barón lo dejó bien clarito: “Lo buscamos por todos lados y no pudimos convertir. Estamos en una instancia dónde no podemos desperdiciar tantas situaciones. No hace falta ganar 3-0, el arquero de ellos fue figura”.

En la misma sintonía, Gianunzio opinó: “Nos da bronca no haberlo ganado. No convertir todo lo que creamos molesta pero ahora jugamos de local. Jugando así tenemos chances de ganar varios juegos”.

A esa altura, el negro Tucán gritaba afónico para que lo pusieran de 9. Pero un chirlo lo acomodó rápido. Y fue Ribonetto, que también habló de la impericia para definir: “Los partidos se ganan haciendo goles. Hay que mejorar ese aspecto, falta que la emboquemos. Lo importante es que mantuvimos el cero en nuestro arco”.

Con la siesta pegando duro, Uriel, de la filial de Villa María, transpiraba cincuenta litros (¿de agua?) por segundo. Es que Sacri no podía y Riaño tampoco.

“No quiere entrar la gran puta madre que lo re mil parió”, tiró un plateista camuflado entre los locales. Y, en este fútbol empachado de exitismo, desperdiciar tantas chances de gol es tan peligroso como coquetear con la madre de tu novia.

“La amargura es haber tenido chances y no meterlas. Pensando en lo que viene, es importante concretar”, analizó Crivelli. Y la palabra amargura quedó en el paladar de los Matadores con un gusto bien rancio.

Con el 0-0 inamovible, algunos buscaron en la popu a los goleadores del camping. Pero ya era tarde. Embroncado, un grone apareció desde las sombras y sugirió que las pelotas debían ser bolsas de carbón. Capaz la historia era otra.

Al final, hubo más de 1.200 Matadores

A simple vista se notó que había más de 1.200 hinchas de Talleres. En principio, esa fue la cantidad que se iba a vender para los parciales cordobeses. Sin embargo, en las últimas horas del viernes llegaron desde Sunchales algunas entradas más. Además, ayer, la dirigencia del Fondo entabló gestiones para que pudiesen ingresar algunos simpatizantes más.Rodrigo Escribano, titular del Fondo, lo confirmó a Día a Día.

“Al final, el viernes llegaron unas 300 entradas más para la venta. Hoy (por ayer) aparecieron muchos hinchas sin boletos y se consiguió que se vendieran más entradas. Cerca de 1.700 hinchas puso Talleres”.

Polémicas. Promediando el ST, Riaño convirtió un gol que fue anulado. El juez asistente Sajer entendió que Sacripanti, que le dio el pase al ex Racing, estaba en offside. Después, hubo un penal (mano de Fler) que el árbitro Gustavo Fabián entendió “casual”. El referí interpretó que el defensor no quiso tocar la pelota y que la bocha buscó la mano y no al revés.Además, el referí le anuló un gol al equipo santafesino. Emanuel García la empujó al fondo después de que Crivelli diera rebote en un remate de Triverio. Al final, se cobró una posición adelantada que no había. Durante el juego, el juez estuvo lejos de la jugada. Otra discutida fue la no expulsión de Pieters que cometió una falta al borde del área. Varios entendieron que era último recurso.

Mundo Albiazul

Más que nanas.. Cosaro terminó con una contractura. Barón tiene con un golpe en el metatarsiano. Ambos llegarán ante Sportivo Belgrano dentro de dos domingos.

Vuelven. Mañana a la tarde, el plantel vuelve a entrenarse en la Boutique. El finde hay fecha libre por el Nonagonal.

Los lesionados, apoyando. Juan Pablo Rezzónico y Víctor Cejas, ambos recuperándose de lesiones de ligamentos en las rodillas, estuvieron ayer en el estadio.

Tubulares. Los miembros del Fondo de Inversión que administra el club junto al Fideicomoso se tomará el tiempo necesario y evaluará la colocación o no de las tubulares. Durante la semana habrá precisiones.

En cero. Después de tres partidos, pudo terminar en 0 en su arco.