Un coqueto Talleres vestido de blanco, derrotó con autoridad por 3-1 a un frío Central Córdoba de Santiago del Estero. Ya está segundo en la Zona 3.

Coqueto, elegante y casi sin ensuciarse. Fachero, encarador, como ese langa que gana en los boliches. Esa imagen dejó Talleres anoche en el Chateau. La T, vestida de blanco, jugó un gran primer tiempo y superó con claridad 3-1 a Central Córdoba de Santiago del Estero. Roberto Moreira Aldana, Agustín Díaz e Ignacio Anívole, de penal, marcaron los goles del equipo de Saporiti, que quedó segundo en la Zona 3 del Argentino A, que consiguió su tercera victoria al hilo y que el miércoles próximo visitará a Juventud Antoniana de Salta.

Al medio y adentro. Tac, toca Monay para Díaz. Tac, le devuelve el enganche al rubio en la zona central. En eso, el 5 levanta la cabeza y ve unos rulos que se despeinan por derecha. Es Arce, quien inicia su carrera y se muestra para el desborde. Ni hablar de lo que sucede por la izquierda. Anívole electrifica sus clinas, la pide y pasa como un rayo lanzado al ataque. Y lo hace una y otra vez. Así salió a jugar Talleres anoche. Ganando el mediocampo. Presionando arriba y lastimando por afuera. Como dicen los libros. Como a cualquier DT le gusta que juegue su equipo.

Y, con un despliegue así, la ventaja no tardó en llegar. Jugada rapidísima, a velocidad Nacional B, entre Díaz y Anívole. El zurdo ex Ferro levanta la cabeza y habilita a Moreira Aldana, quien queda solito en la puerta del área. El Paraguayo se acomoda, se perfila y la pone junto al palo izquierdo del arquero Montenegro. Golazo de la T. Palazo para un equipo santiagueño que salió dormido y que, a los cuatro minutos, ya se metía en problemas.

Y el Matador no detuvo la marcha. O bien, lo hizo, pero por escasos minutos, porque, a los 19, una genialidad de Díaz puso las cosas 2-0. Prácticamente selló la historia.

Salió el pelotazo desde el fondo albiazul y Moreira Aldana la peleó arriba. El Tín, que había picado como un delantero más, la paró, la adelantó y se la colgó al pobre Montenegro que estaba adelantado y que alcanzó a rozar una pelota que ya tenía destino de red. Otro gran gol de Talleres. Otro gran festejo en la popu del autotrol. ¿Complicó alguna vez Central Córdoba a Giordano? Sí, en dos oportunidades y con dos remates desde lejos. El primero ejecutado por Javier Contreras (pasó muy cerca) y el segundo por Sebastián Sáez (el 1 albiazul la despejó al córner). Poquito. Muy poquito para la visita, que la vio pasar en la mayor parte de ese PT.

Durmió la siesta y sufrió. Ni Talleres salió a liquidarlo, ni Central Córdoba a remontarlo. El complemento se dio así, aburrido. El partido parecía dormido y la cosa le convenía al local. Sin embargo, el descuento de la visita sacudió la modorra y encendió la luz roja, la señal de alerta en la T.

A los 22 minutos, Sáez metió una palomita que se coló en el arco de Giordano y el suspenso se adueñó del Chateau. Pero... ese suspenso nunca llegó a ser terror, porque, a los 30, el árbitro González pitó penal para Talleres y le sacó la roja a Cáceres. Luego, Anívole lo cambió por gol con un zurdazo y selló el triunfo. Fiesta albiazul y delirio. La T pasó el desafío de la blancura.

La Figura. Ignacio Anívole. El carrilero por izquierda de Talleres se comió la cancha. Ganó en el mano a mano, desbordó cada vez que se lo propuso y participó del primer gol y del tercero, al convertir el penal que liquidó el partido. También se destacaron las actuaciones de Agustín Díaz y Federico Arce, dos volantes que estuvieron “encendidos”. El enganche metió una pepa de antología y se fue ovacionado cuando Sanjurjo ingresó por él en el complemento. En tanto, en líneas generales, muy bien el equipo en el fondo también.