Por segunda vez, la concesionaria pidió el apartamiento de Carlos Tale.

El 30 de junio era la fecha que el juez Carlos Tale anunció como el fin de la concesión de Ateliers. El día llegó y encontró al magistrado, que administra la quiebra del club, un tanto desencantado. No sólo que Tale no pudo ponerle fin al ciclo de la SA (la Cámara 3 le dijo que no resuelva nada hasta que determine si estuvo bien denegada la prórroga a la gerenciadora), sino que se vio obligado aceptar que Ateliers siga al mando del club, al menos por dos meses, y a tener que afrontar un nuevo pedido de recusación por parte de la empresa de Carlos Ahumada, que busca su apartamiento de la causa.

“Hay una serie de hechos, a nuestro juicio, que están denotando una pérdida total de objetividad y de ecuanimidad en las tareas que está realizando”, explicó Juan Vila, abogado de la SA.

Además, cuestionó adelantos de opinión del juez, que la sentencia de remate del predio albiazul se incluyera en el expediente de la quiebra dos días después de lo previsto, pero con fecha original y algunas expresiones del abogado de Tale, Juan Fernández Alé.

El pedido fue presentado ante el propio Tale, quien no haría lugar a la solicitud. Así Ateliers deberá recurrir a la Cámara 3. Si hay un fallo favorable a Ateliers, la causa irá a parar a otro juez. Si confirma a Tale (como pasó en diciembre pasado cuando intentaron recusarlo también por adelanto de opinión), seguirá administrando la quiebra. Igual, no habrá decisión hasta después de la feria judicial que se inicia el viernes.

Argumentos. “Más que animosidad, lo centraría en una pérdida de objetividad. El juez dice en La Voz del Interior: ‘Cayó el imperio romano. Lo mataron a Jesucristo ¿Por qué no puede caer Talleres’, y después de eso remata un predio. No necesito ser abogado para darme cuenta cuáles son los pasos”, dijo Vila.

“Va adelante contra los bienes de Talleres. Creemos que hay otras vías. Convencerlo es difícil. Como partió de la posición de que Ahumada debía irse el 30 de junio y tuvo que venir un superior jerárquico a decirle lo contrario”, agregó Vila.

En cuanto a las fojas agregadas al expediente fuera de término, el abogado dijo: “El 23 de junio la sentencia de remate del predio no estaba ni el legajo y ni en el ‘para agregar’. El día 24 apareció agregada, pero con fecha 22. Tendría que haber estado sobre todo, porque desde que se decretó la quiebra de Talleres, es la sentencia más importante”.

El abogado de la SA también cuestionó a Fernández Alé. “Un juez no puede tener un vocero que anuncia las medidas que el juez va a tomar”, cerró Vila.

Respuesta de Fernández Alé. “No soy el vocero de Tale. Sólo soy su abogado, y cada vez que me han preguntado por el futuro de Talleres he contestado a título personal y sin tener conocimiento de lo que haría el juez al respecto. Tale nunca adelantó opinión”, dijo Fernández Alé.