El descenso situó a Talleres en el Torneo Argentino A, que para la AFA es una categoría amateur en la que los clubes no registran contratos.

Así, los jugadores que tenían contrato vigente, con la prórroga correspondiente, podrían quedarse y mantener el estatus de profesionales (con un aumento del 20 por ciento de su sueldo). Aunque en casos como los de Julio Buffarini y Matías Quiroga, amparados por la Fifa, pueden solicitar su libertad de acción. Juan Galarraga, con contrato hasta fin de mes, se quedaría.

En el caso de los juveniles menores de 21 años, a los que se decidió realizarles el primer contrato, también deben seguir. Ya les enviaron las cartas documento a Lucas Godoy, Juan Aballay y Sebastián Taborda, entre otros.