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Cuevas volvería a la titularidad ante Chacarita. En el debut de Insúa como DT, habría cinco cambios. Foto: LaVoz / Antonio Carrizo.

Con Insúa como DT, el equipo será anunciado en la semana. Las prácticas serán abiertas.

El debut ante Chacarita es mañana a las 21.35. Rubén Insúa, flamante de DT de Talleres, no puede ganarle al tiempo pero tampoco lo quiere de enemigo. El relevo de Salvador Capitano sabe que en cuatro prácticas no conocerá vida y obra de todo el plantel, pero sí aspira a tener los indicios que lo lleven al objetivo de encontrar el mejor equipo.

Las casi tres horas de práctica como promedio (ayer hubo media hora menos) fueron matizadas con ejercicios físicos, fútbol reducido y un ensayo final. Las certezas fueron llegando, “el Gallego” afinó la puntería y ayer se mostró en condiciones de confirmar “su primer” equipo.

Damián Grosso; Juan Gil, Gabriel Oyola, Marco Torsiglieri y Germán Rivera; Julio Buffarini, Franco Dolci y Matías Quiroga; Emanuel Rivas; Iván Borghello y Héctor Cuevas fue la formación que ordenó Insúa.

“Confirmo los equipos el día anterior. Pero lo que vieron ustedes es lo más probable. ¿Cuevas? Es posible”, señaló Insúa al cierre de otra agotadora práctica en la Boutique.

La era Insúa. En las cinco variantes que realizará se advierte algo del libreto que piensa utilizar Insúa. El DT arrancó por el fondo: desde el primer ensayo, ubicó a Grosso, un arquero de experiencia y que aún no debutó, en lugar del pibe Valentín Brasca.

Luego mandó a Gill al lateral derecho (era marcador central); suplió al suspendido Julián Maidana por Oyola (“borrado” por Capitano, tras un intercambio de opiniones); “convirtió” a Torsiglieri nuevamente en zaguero y confirmó a Rivera como lateral. José Gómez dejará la formación.

En el medio, velocidad por manejo: Julio Buffarini irá por el expulsado Lucas Rimoldi. La otra noticia es el adiós al doble cinco. El DT prescindió de Basualdo y dejó a Dolci como único volante central. ¿Y arriba? La gran novedad; el ingreso de Héctor Cuevas para formar dupla con Borghello. Finalmente, Emanuel Rivas será el enganche.

En la era Insúa, las referencias de su trabajo empiezan a verse: cinco cambios en el debut, la confirmación del equipo con anticipación, prácticas a puertas abiertas, indicaciones y diálogos más personalizados.