El delantero ecuatoriano de 32 años dejó una buena imagen en la “T”. Hoy intenta volver a ser en el São Paulo, donde perdió terreno.

Joao Rojas fue una de esas incorporaciones “a lo Fassi”. De las que sorprenden a los futboleros cordobeses porque trae futbolistas cuyos nombres y apellidos no están en el radar. Aunque, en muchos casos, el presidente Andrés Fassi la termina clavando al ángulo.

Uno de esos casos recientes fue el del defensor Piero Hincapié, hoy transferido a Bayer Leverkusen, de Alemania. Otro similar, que dio qué hablar en Talleres por su “desconocimiento” previo y por el impacto que tuvo después, fue el de Joao Rojas.

Un delantero ecuatoriano no figuraba en los planes de nadie. Y resultó una grata sorpresa. En la temporada 2017-2018, Joao se hizo querer por los hinchas. Con buenas actuaciones y cierto desenfado para encarar a los defensores visitantes. Jugó 25 partidos, hizo un gol (a Godoy Cruz, en Mendoza) y dio seis asistencias. Nada mal.

Lo que cayó mal en algunos simpatizantes es que se haya ido “tan rápido” de Talleres. Aunque, cosas del destino, su salida fue “tapada” con la llegada de Diego Valoyes, lo que da para otra historia.

Lo cierto es que Joao impactó en el São Paulo, uno de los clubes más grandes del continente. Anduvo bien de entrada, con goles y participaciones decisivas. Tan lindo venía todo para él que parecía irreal. Hasta que le llegó una mala que le complicó su bienestar.

Se rompió, en 2019, el tendón rotuliano de su rodilla derecha y eso frenó su ascenso. Cuando volvió, otra lesión le quitó despliegue a su aura de atacante explosivo.

Hoy Joao Rojas está sano pero, en términos futbolísticos, está “tratando de volver”. Fue suplente en el equipo que venció a Gremio en el Brasileirao, el sábado, y el DT Hernán Crespo no parece estar “enamorado” del presente de Joao ni de su pasado: tiene 48 presentaciones con cinco goles y seis asistencias.

“Rojas tenía vínculo con el club solamente hasta el final del Campeonato Paulista. Participó bien del torneo como suplente, hizo un par de goles y São Paulo decidió renovarle el contrato. Pero desde el Paulista ha jugado cada vez menos, y viene de una racha sin goles que ya dura bastante”, reseña Bruno Rodrigues, periodista del diario Folha de San Pablo ante la consulta de La Voz.

“El equipo está con problemas de lesiones en la delantera. En los últimos partidos, Crespo no pudo contar con Luciano (goleador en 2020), Marquinhos y Éder (ex selección italiana). No ha utilizado a Rojas ni con esas ausencias”, amplía Bruno Rodrígues.

La cuestión es que Joao sí tiene banca de los hinchas. “Los torcedores tienen de él una buena consideración, aunque no esté demostrando mucho en la cancha. Rojas quedó casi dos años parado por lesiones en una de las rodillas y volvió en el fin de la última temporada. Creo que hay también una simpatía por su historia de superación de esa lesión”.

Mientras la atención por Joao Rojas va en baja… el que se va para arriba es Emiliano Rigoni, el cordobés ex-Belgrano del que todos hablan en la ciudad. Y São Paulo no es una ciudad chica (más de 15 millones de personas la habitan). Quizás todavía haya espacio para que Joao Rojas sea el que fue en Talleres y los paulistas vuelvan a tenerlo en el radar.