De gran personalidad dentro y fuera de la cancha, deja a Junior donde es ídolo. "Cuando pierde un partido, no habla y ni come. Siempre quiere ganar", dice su esposa.

Rafael Enrique Pérez Almeida es el nombre completo del primer refuerzo de Talleres. Su apodo lo dice todo. "La Murralla", tal como se lo conoce es un jugador, cumplió 30 años el 9 de enero pasado y era el caudillo e ídolo de Junior de Barranquilla, club con el que obtuvo cuatro títulos. 

Aunque es un tipo recio y difícil de gambetear ha recibido una sola roja en 125 partidos. Mide 1,86 metros y nació en Cartagena. 

"Yo soy una persona muy tranquila y muy fácil de adaptar. En todos los lugares que he estado me acoplado de manera rápida", se define.

"Mi sueño siempre ha sido estar en la élite del futbol europeo. Poco a poco y con trabajo vamos escalando para llegar a esa posición", es su objetivo.

"La Muralla" llegó a Junior de la mano de Julio Comesaña, pero la llegada de Dany Rosero, hizo que el zaguero retomara la idea de dejar al equipo de Barranquilla. "Rafael Pérez ha tenido la posibilidad en el semestre pasado de irse al exterior y nosotros estábamos en unas circunstancias en las que no debíamos permitir eso porque no teníamos más zagueros. Hace poco me comentó que volvía a tener esa posibilidad y que la opción la quería tomar. Si la quiere tomar es porque no quiere continuar y en ese caso yo tampoco iba a cortar esa opción", expresó el DT uruguayo, hace unos días.

"Cuando llegué del fútbol búlgaro hubo un montón de comentarios adversos y los cambié. Llegamos hasta una final de Copa Sudamericana ante Paranaense y la perdimos en 2018 por penales. Pero logramos la octava estrella del club, que venía siendo esquiva", supo decir Pérez, quien es colombiano al igual que Diego Valoyes y Dayro Moreno.

En tiempo en los que a algunos jugadores no sienten demasiado las derrotas y se olvidan rápido, "la Muralla" siente distinto. "Cuando pierde un partido, no habla y ni come. No quiere salir de la cada. Siempre quiere ganar. Pero han sido pocas veces. Es capitán y líder y la gente lo adopta en el acto. Todavía le falta mucho por demostrar", dice su esposa Angie.

"No ganar me afecta muchísimo. Sufro, igual que mi familia", corrobó el zaguero, que llegará en horas a Córdoba.

Su legajo

Pérez debutó en el Real Cartagena en 2008 y pasó por el fútbol chino (Chongqing), Independiente Santa Fe, Independiente Medellín, Portuguesa de Brasil y hasta en Europa tuvo la oportunidad de jugar como en el Litex y el CSKA búlgaros. Parecía haber encontrado su lugar en Junior, hasta que decidió venirse a Talleres.

Tiene 326 partidos jugados y nueve goles en su carrera.