Por aquel ascenso se prometieron pagar cuatro millones de pesos y la deuda quedó en $ 3.182.000. Con intereses y costas, se irá a 4,5 millones de pesos aproximadamente.

La Justicia falló a favor de tres de los más de 20 futbolistas que iniciaron juicio para cobrar aquella remuneración que prometió pagar el Fondo de Inversión y que terminó asumiendo la actual conducción.

El premio por el ascenso de 2013 sigue siendo un dolor de cabeza para Talleres. En las últimas horas, la Justicia falló a favor de tres de los más de 20 futbolistas que iniciaron juicio para cobrar aquella remuneración que prometió pagar el Fondo de Inversión y que terminó asumiendo la actual conducción.

“Se acordó una forma de pago que el club no cumplió. Los jugadores se cansaron. Trabaremos embargos para que cobren”, dijo Luis Taboada, abogado de Agremiados y representante de los jugadores. El club planteó excepciones y nulidades, pero hasta ahora no ha tenido éxito.

La deuda inicial era de 3.182.000 pesos y con intereses llegaría a los 4.500.000.