Así lo decidió el Gobierno puntano. Es por los antecedentes del choque de octubre de 2009, en el "Juan Gilberto Funes".

No habrá vuelta atrás, más allá de que la medida no satisfaga ni a Juventud Unida Universitario ni a Talleres. El partido entre el equipo puntano y el Matador, por la sexta fecha del undecagonal, irá finalmente el próximo jueves, a las 21.30, en el estadio del Bajo de Juventud, y no en el estadio de La Punta, según confirmó ayer a Mundo D el secretario del club de San Luis, Juan Martín Divizia.

“No hubo forma de convencer a la ministro de Deportes de la provincia (Adelaida Muñiz) de que se juegue en La Punta. Nos dijo que la última vez que vino jugar Talleres al estadio sus hinchas causaron destrozos en las plateas y que no quería arriesgar el piso del estadio, donde se está jugando el Sudamericano Sub 17”, comentó el dirigente puntano.

“Lamentablemente eso es cosa juzgada y el resultado de ayer frente a San Jorge no tiene nada que ver con esto. Queríamos jugar en La Punta porque es el único partido en el torneo en el que podíamos hacer una buena recaudación. Somos un club chico, necesitamos esa plata. La Policía no quiso ni siquiera habilitar 300 lugares en nuestra cancha para Talleres. Y creemos que sería una burla para ellos aceptar eso con la cantidad de gente que mueve”, agregó el directivo.

Divizia fue más allá aún y le pidió a los hinchas albiazules que no viajen a San Luis “porque no vamos a tener un espacio conveniente para darles y la policía está avisada de que no podrán pasar inadvertidos si los ubicáramos en las plateas”.

Además, una fuente que no es Divizia y que pidió reserva, confió que también existen temores respecto de que algún “infiltrado” de Estudiantes de San Luis, el clásico rival de Juventud, presidido por Carlos Ahumada Kurtz, exgerenciador del club y de Talleres, pudiera causar algún disturbio.