Visiblemente angustiado por la derrota Emiliano Gianunzio expresó que no está terminada la serie. El volante de Talleres dijo que pagan carolos errores.

El final llegó con todo el estruendo, y muchas lágrimas, con jugadores con el ánimo por el piso y masticando bronca a causa de la derrota que lo deja a un paso del abismo. Walter Ribonetto y Federico Crivelli tomaron la posta, y el liderazgo, para reunir a todos en el centro del campo de juego. La frase de aliento y arenga fue efímera, levantaron los brazos en señal de perdón y como respuesta obtuvieron tímidos aplausos y un baño de silbidos. Destrozado, con los ojos rojos, el volante Emiliano Gianunzio fue el único que dialogó con la prensa apenas concluyó la derrota 2-0 ante Libertad, ya que el resto, por consejo del arquero, optó por el silencio.

“Esto no se puede creer, no lo entiendo (entre sollozos), vinimos a buscar una victoria para reconciliarnos con la gente y seguir luchando, pero nos quedamos sin nada. Esto es muy doloroso, y la verdad no lo esperábamos”, sostuvo el “Polaco” mientras recibía aliento y consuelo por parte de varios futbolistas de Libertad, conmovidos por la escena.

- ¿Qué le faltó a Talleres?
- Nos costó mucho generar jugadas de gol, y nos quedamos sin ideas. Seguimos cometiendo errores que nos condenan. La verdad es difícil de explicar.

- ¿Por qué tanta desesperación?
- Quisimos e intentamos ser protagonistas, pero el gol tempranero de Libertad nos desordenó, sumados a eso volvimos a mostrar errores que los rivales no perdonan. Creo que ese fue el peor pecado.

- ¿Crees que se puede todavía?
- Es un golpe muy duro, pero no termina acá. Si Libertad nos hizo dos goles, nosotros también podemos convertirle. Vamos por la heroica, porque esta camiseta lo exige.

Me preocupa todo, soy el técnico y me tengo que hacer cargo, no hicimos un buen partido, esperábamos otra cosa. Tenemos que sacar diferencia de tres, y vamos a trabajar y dar pelea. Creo que es difícil, pero no imposible. La verdad digo que no es fácil, pero no hay que darse por vencido. Faltan 90 minutos”. Gustavo Coleoni, técnico de Talleres