Razonar como DT, el desafío de Diego Garay, que dirigirá enel semillero. "Decirle a alguien que no juega, es lo peor", afirma el ídolo.

Diego Héctor Garay (35 años) parece haber encontrado su lugar en el mundo. Luego de haber colgado los botines (primero en Sportivo y luego con Mitre de Las Varillas), “el Diego” albiazul dirigirá a los pibes de la clase 1997, cerquita de su compadre Daniel Albornos, una dupla clave en el ascenso ante Belgrano.

“Estoy feliz por tener la chance de retornar al club que me dio todo. Tengo muchas expectativas. El año pasado estuvo a punto de concretarse, en la era Ahumada. Pero no se llegó a un acuerdo. Albornos también había mediado. Ahora me reuní con Escribano, del Fondo de Inversión y se dio el acuerdo”, dijo el sanfrancisqueño.

Si bien el inicio de las prácticas será a mediados de enero, Garay ya estuvo observando algunos juveniles en el torneo Internacional Córdoba Cup. “Estuve observando a algunos chicos. Iré aprendiendo de a poco”, comentó Garay.

–¿Ya razonás como DT?
– Esta es una etapa de aprendizaje mutuo. Para mí y para los chicos también. Hay que enseñarles a los chicos lo que es el sacrificio de llegar a Primera. Es algo nuevo y lindo.

–¿Qué es más importante para un DT: trabajo o manejo de grupos?
–Las dos cosas. El manejo de grupos es clave. En las categorías menores es importante el diálogo con los padres, los psicólogos.

–¿Qué situaciones no querrás vivir como DT?
–El jugador de fútbol es muy complicado. Sobre todo en el hecho de hacerle entender que no va a salir a la cancha. Hay que darle la explicación correcta. Sobre todo en los chicos. 
Esta es la etapa en la que to-
dos quieren jugar. Lo más difícil es decirle a alguien que no va a estar citado. Que ni siquiera irá al banco. Son cosas que de chico no me gustaron y de grande mucho menos. Es un poco lo que es el fútbol.

– ¿Por qué Talleres está en el Argentino A y quebrado?
–Es complicado el panorama, aunque se ve que se está queriendo hacer bien las cosas. Ha mejorado mucho. El club tuvo mucho mal manejo. Esperemos que se salga, porque el resto de los clubes te va perdiendo el respeto. Es un torneo difícil y Talleres puede volver. Pero no es tan fácil.