El técnico de Talleres resaltó la reacción de sus dirigidos. "Cerramos el partido desde lo táctico", señaló.

“Hay que seguir creciendo, porque estoy convencido de que éste no es el techo del equipo”, afirmó Héctor Arzubialde, el DT de Talleres, luego de la goleada 5-1 sobre Estudiantes.

“Estamos muy bien, pero no hay que bajar los brazos. Recién acaba la segunda rueda, o sea la mitad de la primera fase”, añadió el entrenador, que justificó en la contundencia de la “T” el triunfo de ayer en el Chateau.

“Arrancamos bien pero nos convirtieron en la primera llegada. En los seis o siete minutos siguientes perdimos el equilibrio y ellos pudieron aumentar. Pero después nos ordenamos, nos sobrepusimos y más que nunca fuimos contundentes”, fue el análisis de Arzubialde.

“Fue una noche que terminó tranquila, pero que no lo fue tanto después del gol de ellos. Lo importante es que el equipo tuvo personalidad para sobrellevar el peor momento”, añadió el técnico del equipo albiazul, quien luego cargó las tintas contra el árbitro Leandro Botoni. “¡Ah! No me quiero olvidar que hubo un penal (de Reartes a Riaño) en el primer tiempo. ¡No nos dan una! Decí que este equipo tiene argumentos sólidos para dar vuelta una historia”, afirmó. “Le dije que me estaba debiendo un penal y por eso me mandó al vestuario”, expresó el DT sobre su expulsión, a los 38 minutos del primer tiempo.

Finalmente, Arzubialde instó a sus jugadores a “seguir ganando y no bajar los brazos hasta el 13 de diciembre” y subrayó que, después del receso, el objetivo será el mismo. “No hay que hablar tanto del objetivo. Está implícito desde que comenzó esta historia. Estar repitiéndolo a cada rato sólo nos agrega más presión”, señaló.

¿Seguirá Mattea? La salida de Estudiantes del Chateau se demoró bastante. Y cuando se abrieron las puertas del vestuario visitante, Hugo Mattea se retiró sin hablar. El largo cónclave que el DT mantuvo con varios dirigentes en el camarín y ese mutismo poco habitual en él, dejaron flotando la duda sobre su continuidad. El arquero José Mancinelli fue quien sintetizó el sentimiento celeste: “Pudimos asegurarlo. No pensábamos perder así”.