Con mucha mesura, como caracteriza, el técnico de Talleres, Héctor Arzubialde destacó la victoria, además de elogiar a Ramiro Pereyra. “Demostró que está a la altura y es otra opción en la creación”, destacó.

“Los jugadores hicieron un gran esfuerzo y fueron inteligentes ante la inferiores numérica. Eso me deja contento. Todos hicimos un esfuerzo doble, nos amoldamos a las funciones y por suerte los tres puntos quedaron en casa”, siguió el discurso de Arzubialde. Además, remarcó la unidad grupal: “Tengo mucha tranquilidad, el convencimiento de que lo más importante de todo va por buen camino. En el vestuario se está gestando lo fundamental, el esfuerzo de todos y el compromiso grupal. Esa es la base de toda estructura”. “Necesitamos equilibrar y por eso ingresó (Miguel) Monay en la mitad de la cancha. Hubiera querido tener otro recambio, porque cuando se lesionó (Ignacio) Anívole no tenía a Mateo Martinelli para cubrir el sector izquierdo. Por eso, destaco el sacrificio del grupo. Lo quiero marcar de nuevo, lo más importante se está gestando en el vestuario”, añadió.

También, el entrenador albiazul recordó su paso por Alumni: “Dirigí un año y medio en Villa María, dejé muchos afectos, logramos el ascenso al Argentino A y por eso este partido era especial. A Alumni lo empujamos desde lo anímico a un abismo sin retorno. Y ésa fue la clave”, remarcó.