El volante derecho que debutó el viernes ante Racing es enganche, pero juega en todos los puestos del medio. Viene de Fitz Simon de Embalse y llegó a la "T" hace siete meses.

En octubre del año pasado, después de varios meses de jugar en Fitz Simon, el club de Embalse, su "pueblo", Damián Jeremías Zenón (20) esperaba que se le abriera alguna puerta en el fútbol cordobés.

Un martes de ese mes la fortuna le tocó la puerta y fue a probarse a Talleres, con la posibilidad de sumarse al equipo de la Liga. El volante polifuncional –es "10", pero puede jugar en todos los puestos del medio, de defensor y hasta de arquero jugó en la Liga Cordobesa– pasó la prueba y tenía todo listo para quedarse, pero las derivaciones de la salida de Carlos Ahumada como gerenciador del club frustraron su intención.

Tuvo que esperar hasta enero de este año, cuando fue convocado para otra prueba, en el predio albiazul, de la que salió nuevamente airoso y su incorporación al "Tallerito", se hizo, por fin, realidad.

Lo que vino después fue meteórico. Sus buenas actuaciones lo pusieron a la vista de Héctor Chazarreta y Eduardo Larghi, coordinadores del fútbol del club, quienes "datearon" a Andrés Rebottaro, primero, y a Héctor Arzubialde, después, respecto de las virtudes futbolísticas de ese tal Zenón, el pibe que tiene como apellido un nombre de raigambre gauchesca y campera.

"Arzu" lo convocó para la pretemporada, "el Negro" Marín lo "peló" en la concentración de Villa Carlos Paz y el viernes por la mañana, el DT le comunicó que entraría entre los 18 que enfrentarían a Racing. Lo que sintió cuando a los 11 minutos del complemento Arzubialde lo mandó a calentar para reemplazar a Sebastián Navarro, se lo narró ayer, todavía incrédulo, a Mundo D.

"Todavía no puedo caer. No me imaginaba estar entre los 18, y menos que entraría a jugar. Me temblaban las piernas. Me dijo que entrara confiado, que tuviera la pelota y encarara. Con los minutos me fui tranquilizado y creo que cumplí", comentó el juvenil volante, nacido en Santa Rosa de Calamuchita.

Sí, Zenón, cumpliste. Con tu ida y vuelta, atrevimiento y pegada, Arzubialde te puede dar la "8" o la "10", como te gustaría a vos, y cumplir. Inclusive te animaste a probar al arco y a punto estuviste de meterla.

"Siempre me voy a acordar de este debut. Hasta mis viejos, que tenían una fiesta en Embalse a la que no podían faltar, se vinieron al Chateau para verme. Nunca había jugado ante tantas personas", puntualizó Zenón, quien hizo las inferiores en Instituto y también pasó por Renato Cesarini de Rosario.

Y sí, pibe. Todo llega, como la chance de debutar en primera y trascender. La pelota la tenés vos y con una ventaja: Arzubialde ya te dio el okey.