Carlos Ahumada sigue sin hablar con la prensa, pero sí lo hizo con el órgano fiduciario en la sede, y se comprometió a cumplir con sus obligaciones. “No pasa nada”, coincidieron los fiduciarios, de muy buen humor como el gerenciador.

Eran las 15.35 y los fiduciarios de Talleres bajaban por las escaleras de la sede del club con notorio conformismo y de buen humor. ¿Y los avatares de los últimos tiempos en el ámbito albiazul? «No pasa nada amigo, está todo arreglado. ¿No ves que no tenemos cara de preocupación? Lógicamente que tuvimos que solucionar algunos temas, pero no pasó nada que haga peligrar el gerenciamiento», explicó con firmeza Gustavo Eluani, contador del fideicomiso.

Y después apareció Daniel Ruffener, abogado del triunvirato, para terminar de aclarar la situación. «Fue una reunión importante con (Carlos) Ahumada y nada más. Se comprometió a cumplir con sus obligaciones y tiene tiempo hasta diciembre para hacerlo».

El foco principal de conflicto se dio la semana pasada, cuando casi a modo de ultimátum, Ahumada pidió a la Justicia que le confirmaran la prórroga de concesión de gerenciamiento por tres años más. El empresario argumentó que no quiere seguir invirtiendo sin precisiones del tiempo en que estará al frente y a raíz de las obras en el predio de las 24 hectáreas, en la Boutique y en el armado del plantel profesional.

Y como el juez Carlos Tale se opuso a tal pedido, exponiendo que por las irregularidades de público conocimiento (la deuda en Agremiados y con el canon semestral, por ejemplo), el gerenciamiento de Ateliers tendría su fin en diciembre, cuando termina su primer ciclo.

De todos modos, el fideicomiso es optimista: «Ahumada prometió cancelar la deuda con nosotros en los próximos días, y si presenta un mejor proyecto por avales, seguirá al frente y le renovarán la concesión sin inconvenientes», explicó uno de los integrantes. «Además, vamos a hablar con el juez para que todo llegue a una solución. Este hombre puso mucha plata en el club y queremos que siga invirtiendo», añadió.

¿Y Ahumada? Ante la consulta del periodista de LA MAÑANA, se limitó a decir, sonriente: «Me caes muy bien, de esa manera te respondo», y dio media vuelta para marcharse, acompañado de sus apoderados Jacobo Grossman y Luis Maurillo Fuentes.

¿Está todo bien o todo mal en Talleres? ¿Será cierto que amagó con rescindir el contrato de Federico Lussenhoff y de Celso Esquivel, y que pese a que tiene todo acordado, duda en incorporar a Luis Salmerón y Jhon Galliquio? Hay quienes sostienen que así como Tale mete presión a través de algunos medios, Ahumada también hizo su juego ante los fideicomisarios.